Mario Delgado

Con la liberalización del precio de los combustibles el único que gana es el gobierno: Mario Delgado

* Mientras en Texas los impuestos a la gasolina representan 2 pesos en nuestro país son de 7 pesos, ante ello el pronóstico no puede ser disminución de precio.

El paquete económico para 2017 propone adelantar la liberalización de los precios de las gasolinas y el diésel para que se determinen bajo las condiciones del mercado, así tendremos gasolinas caras pero el gobierno se lavará las manos y dirá que es resultado de los precios internacionales, afirmó el senador Mario Delgado Carrillo.

“Con la liberalización del precio de la gasolina el gobierno pretende aumentar sus ingresos con un crecimiento de estos del 31 por ciento real con respecto a 2016, pues sólo de impuestos se le cargará a cada litro 7 pesos mientras que en Texas, donde se tienen las mismas condiciones y de donde se trae la mayor del combustible el monto de impuestos es de apenas 2 pesos”, explicó Delgado Carrillo.

Indicó que aunque nos prometieron que ya no habría gasolinazos e incluso que bajaría el precio, eso es otra más de las mentiras que nos ha dicho el gobierno federal, pues continua su carrera al alza.

Comentó que el gobierno propone que durante el 2017 y 2018 la Comisión Reguladora de Energía, con opinión de la Comisión Federal de Competencia Económica, establezca regiones en las que se liberalice el mercado de estos combustibles, y los precios se determinen de manera libre por las gasolineras.

Así, dijo que con la liberalización de los precios de las gasolinas y diésel, el gobierno estima recaudar el siguiente año 284 mil 432.3 millones de pesos por el Impuestos Especial a Productos y Servicios a las gasolinas, lo que  significa un crecimiento de 31% real respecto de 2016.

Lo anterior, consideró es resultado de que se reformularon los impuestos a los combustibles para garantizar que el gobierno reciba una cuota de alrededor de 4 pesos por litro de la venta de gasolina y diésel a lo cual se le sumaría el impuesto a los combustibles fósiles y el impuesto al valor agregado, quedando carga fiscal por litro de gasolina en aproximadamente 7 pesos por litro.

El senador, integrante de la comisión de Hacienda de la cámara alta, dijo que los impuestos a las gasolinas han compensado una buena parte de la caída de los ingresos petroleros y prueba de ello es que en 2015 los ingresos petroleros quedaron 354 mil 288.7 millones de pesos por debajo de la meta establecida en la Ley de Ingresos, mientras que la recaudación por IEPS  a gasolinas superó lo programado en 189 mil 769.1 millones de pesos, lo que permitió cubrir el 53% de la caída de los ingresos petroleros de ese año.

“En la liberalización de los precios de las gasolinas el único que sale ganando es el gobierno y lo hace nuevamente a costa del bolsillo de las familias y de las empresas pues con ella no importa cual si el precio internacional de las gasolinas disminuya ya que no habrá ningún beneficio en el bolsillo de los mexicanos, porque la carga fiscal impuesta hará imposible que el precio de venta para los consumidores mexicanos lo refleje. Incluso, los precios podrían disiparse por encima de lo observado durante el 2016”, indicó el legislador.

Mencionó que de acuerdo con un pronóstico del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria, A.C. (CIEP) con la liberalización del precio de las gasolinas y diésel el precio de la Magna podría llegar a los 15.33 pesos y la Premium a 16.65 pesos.

“El gobierno propone la liberalización del precio de las gasolinas como una estrategia más para incrementar sus ingresos y entregar un mercado que antes era exclusivo de PEMEX a particulares, sin que esto signifique un beneficio a la economía familiar ni de la mayoría de las empresas en México”, concluyó.